domingo, 24 de febrero de 2008

Fiesta azteca

La banda mexicana Café Tacuba hizo bailar anoche a las más de tres mil personas que los siguieron hasta el teatro Gran Rex, donde en un enérgico show de casi tres horas reunieron temas de su última placa “Sino” con los clásicos de su carrera.

Rubén Albarrán (voz), Emmanuel “Meme” del Real (teclados), Quique Rangel (bajo) y Joselo Rangel (guitarra) salieron a escena a las 21.50 con “Seguir siendo” unido a “Tengo todo”, temas que también inauguran su última producción.

Albarrán (cuyo seudónimo actual es Cone Cahuitl), de traje y sombrero blancos, atrajo con su carisma habitual todas las miradas, que siguieron cada gesto, cada palabra, cada paso frenético por un escenario del que fue dueño absoluto desde el primer al último acorde.

Al público, compuesto por jóvenes de entre 20 y 30 años, poco le importaron las butacas a la hora de bailar con “Eo”, el pop electrónico de “Volver a comenzar", o la cadencia de “El outsider”, tema que las pantallas que completaban la escena acompañaron con imágenes urbanas de estética punk, como stencils y graffittis.

Para “Chica banda”, varias decenas de las damas del público aceptaron la invitación del vocalista para subir al escenario, donde saltaron, bailaron, y no perdieron oportunidad de demostrar su afecto por los músicos, hasta que finalmente levantaron al pequeño Rubén Albarrán en andas.

La principal característica del repertorio del combo mexicano, devenido en quinteto con la incorporación en vivo del baterista Luis Ledezma, es la de no detenerse a la hora de echar mano a distintos géneros, lo que les otorga un abanico rítmico que interpretan con soltura.

Lejos de restarles consistencia, la amplitud estilística les brinda la oportunidad de mostrar un excelente manejo de los climas y matices, tanto en lo compositivo como en el ensamble, coronado por la simpática torpeza de algunos intentos coreográficos, con más aire de parodia que pretensiones.

El extenso show tuvo lugar para la reminiscencia folclórica del clásico "Ingrata", los aires latinos de "El puñal y el corazón", el pop romántico de "Eres", el valsecito melancólico "Medio día" y la alegría circense de "El fin de la infancia".

Luego de una hora y media de recital, lo que en principio presagiaba un breve segmento de bises, se convirtió en una segunda mitad del show, en la que la banda, uno de los principales referentes de la escena actual del rock en español, accedió a los pedidos del público para continuar con la lista de temas.

Fue el turno de “María”, “El metro”, “Persianas”, la coreada “Cómo te extraño” y el cierre con “Y es que”, del disco Sino, última producción de los mexicanos que, sin necesidad de más artilugios que la música y el carisma, dejaron al público con ganas de una nueva visita.

viernes, 1 de febrero de 2008

Estimados clientes:

Por medio de la presente se informa que, luego de una extensa licencia sin goce de haberes, las musas se han reincorporado a sus funciones habituales.

Contando con su asesoría, esta prestigiosa publicación (o algo así) retoma sus actividades en el día de la fecha.

Sepan disculpar las molestias.